Camel es una producción desarrollada en un entorno arquitectónico degradado que exigía una planificación precisa, control avanzado de la luz natural y una dirección minuciosa para coordinar estilismo y movimiento. La propuesta combinó arneses artesanales y piezas de moda conceptual, integrándolos en un escenario de texturas ásperas y estructuras metálicas que aportaban contraste visual. El tratamiento del color se orientó a resaltar la interacción entre materiales, piel y ambiente, manteniendo una estética editorial limpia y coherente. El resultado es una serie que explora la fusión entre moda experimental y espacios abandonados, con un enfoque técnico pensado para maximizar impacto y narrativa visual.
Ikigai es la unión entre lo que amas, lo que sabes hacer. Es tu motivo para levantarte cada día. Aplicado a la moda, funciona como una guía para crear desde la autenticidad: diseñar, fotografiar o estilizar con propósito, usando tu talento para aportar algo real y construir una trayectoria coherente con tu esencia. No es solo estilo; es sentido.
Perpetua se inspira en el recorrido emocional que vivimos ante un problema y lo expresa a través de una transición de colores: del negro, cuando todo se siente pesado, al gris que marca el cambio, seguido del blanco que aporta claridad, para culminar en los rosas suaves e intensos que representan la resolución y la vuelta a la esperanza. El nombre nace de “cadena perpetua”, reinterpretado desde la liberación: soltar lo que te ata hasta que desaparece la condena y solo queda Perpetua.
Garabic es un homenaje a los comienzos. A los garabatos inocentes hechos con un boli Bic, cuando el arte no era técnica, sino pura intuición. Gara de garabato y Bic por la herramienta más simple, pero también la más libre.
Azahara surge de la unión entre el arte y el azar. Una mezcla de inspiración y espontaneidad, como esas creaciones que nacen sin planearse, pero terminan teniendo un significado profundo. Representa la belleza de lo inesperado y la libertad del proceso artístico.